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martes, 8 de abril de 2025

Sakaguchi, Shizuo

 

Sakaguchi, Shizuo. 

Nacido 17 de enero de 1887 en la prefectura de Kumamoto , Japón ; fallecido el  23 de marzo de 1947. Fue un teniente general del ejército imperial japonés .

Después de asistir a la escuela secundaria, Sakaguchi ingresó en la Academia del Ejército Imperial Japonés (clase de 22 graduándose en mayo de 1910. En diciembre del mismo año fue ascendido a teniente de infantería. En agosto de 1920 se convirtió en comandante de compañía del 48º Regimiento de Infantería. Desde abril de 1921 sirvió en el arsenal principal del ejército. En abril de 1925 fue transferido al 3º Regimiento de Infantería de la Guardia. A esto le siguieron misiones en el 27º Regimiento de Infantería y en el cuartel general de la 1ª División. En agosto de 1928 fue destinado al cuartel general de la 7ª División. Dos años más tarde fue nombrado ayudante de la 7ª División y en agosto de 1932 fue asignado al 24º Regimiento de Infantería. En ese momento, Sakaguchi fue ascendido a teniente coronel. Desde agosto de 1935 dirigió el 9º batallón de guarnición independiente.

jueves, 1 de febrero de 2024

Keibodan

 Keibodan


Dos integrantes del Keibodan en una fotografía de estudio

Formado en enero de 1939, el Keibodan fue una organización japonesa de voluntarios cuyo propósito era apoyar las situaciones de emergencia que pudieran producirse especialmente en tiempos de guerra dada la relativa debilidad de las organizaciones policiales y de bomberos existentes. Dicha fuerza auxiliar complementaria ambos servicios de emergencia.  Con mucha diferencia se convirtió en la organización de emergencia más importante que operó en Japón durante la guerra.

En la mayoría de las aldeas, pueblos y ciudades, el Keibodan se cimentó en torno a las anteriores organizaciones comunitarias de extinción de incendios. Los reclutas varones tenían entre 18 y 60 años y recibían poca o ninguna remuneración, cubriendo solo limitados gastos. Si recibieron compensación monetaria los voluntarios que sufrieron heridas en acción , sin embargo, este sistema se vio severamente afectado en 1944 y 1945.

El personal de Keibodan estaba organizado en varias ramas o grupos que desempeñaban diferentes funciones dentro de la organización. El principal brazo era el Shobobu —arma contraincendios—, que constituía el 40 por ciento de la fuerza total de la organización. Le seguía el Keibubu, —arma de vigilancia—, cuyos miembros eran básicamente policías auxiliares, que constituía el 25 por ciento del Keibodan.

lunes, 17 de julio de 2023

Noburo Sakai

 

Noburo Sakai



Noburo Sasaki (佐々木 , Sasaki Minoru, 1 de enero de 1893 - 27 de abril de 1961) a veces conocido como Minoru Sasaki, fue un teniente general del ejército imperial japonés durante la Segunda Guerra Mundial.

Sasaki nació en la prefectura de Hiroshima y estudió en la escuela de enseñanza secundaria de Shudo. A continuación, ingresó en la Academia del Ejército Imperial graduándose en la clase Nº 26 en 1914 siendo destinado como oficial 4 subalterno al 5º Regimiento de Caballería del Ejercito Imperial japones. Se graduó de la clase 35 de la Escuela Superior del Estado Mayor del Ejército en 1923 y, posteriormente, ocupó puestos administrativos dentro del Estado Mayor General del Ejército Imperial Japonés. Fue enviado como agregado militar a la Unión Soviética y Polonia en la década de 1920 para de nuevo regresar al Estado Mayor. Fue ascendido a coronel en agosto de 1937 y a general de división en agosto de 1939, cuando estaba adscrito al Cuartel General de Artillería del Ejército.

En octubre de 1939, Sasaki se convirtió en comandante de la 4.ª Brigada de Caballería de la IJA, que participó activamente en la Segunda Guerra Sino-Japonesa. En diciembre de 1940, se convirtió en Jefe de Estado Mayor del 6º Ejército de la IJA.  Destinado en Hailar, en Mongolia Interior, era el lugar clave de un estático extenso sistema de fortificación japonés, por lo tanto, se halló al mando de una fuerza de guarnición de reserva y entrenamiento. Regresó a Japón en julio de 1942 al estado mayor del Departamento de Guerra Blindada dentro del Ministerio del Ejército y promovió el desarrollo de tanques y guerra blindada dentro del ejército japonés.

martes, 5 de diciembre de 2017

Alferez de navío Junichi Sasai (1918 - 1942)

Alferez de navío Junichi Sasai (1918 - 1942)



Junichi Sasai fue un aviador naval japonés y as de caza de la Armada Imperial Japonesa durante la Segunda Guerra Mundial. Se ganó el título del Richthofen de Rabaul y, a pesar de participar en combate durante un breve periodo de tiempo, su legado como Jefe de Caza todavía está presente en la historia de las Fuerzas Aéreas de la Marina Imperial Japonesa.

Junichi nació el 13 de febrero de 1918 en la prefectura de Tokio. Como hijo de capitán de la Marina, su destino siempre estuvo ligado al ingreso dentro de las Fuerzas Armadas cuando cumpliera la edad correspondiente. Su deficiente salud durante la infancia, le ocasionó a menudo faltas de asistencia en la escuela y burlas de sus compañeros. No obstante, a base de un gran esfuerzo físico y dietético consiguió una mejora considerable de su estado de salud y cuando Junichi Sasai entró en el instituto de enseñanza media ya se hallaba en igualdad de facultades físicas con sus compañeros. Fue aquí donde consiguió el cinturón negro en judo y los logros necesarios para ingresar en la Academia Naval japonesa situada en la isla Etajima, dentro de la bahía de Hiroshima.

En sus años como cadete de la academia fue conocido como "gallo de pelea" por su carácter tenaz y vehemente. Tras graduarse como alferez de fragata en 1939 en la 67ª Clase de la Academia Naval, Sasai pasó a formar parte del 35º Curso de Aviación Naval. Finalizó su entrenamiento como aviador en noviembre de 1941 convirtiéndose en piloto de caza.

El 10 de diciembre de 1941, el alférez Sasai ingresó en el Grupo Aéreo Tainan, que posteriormente se convertiría en la unidad de caza más laureada  de la Marina Japonesa. Con esta formación entró en combate por primera vez sobre las Filipinas, concretamente en una incursión sobre Luzón. Tras intervenir en la invasión de la Filipinas, el Grupo Aéreo Tainan tuvo una actividad importante en las Indias Orientales Holandesas donde fue cuando el 2 de febrero de 1942, Sasai obtuvo su primera victoria al derribar un Brewster Buffalo holandés a la que sumar a la conseguida dieciséis días después sobre un Curtiss P-40 del 17º Sqn. con sólo 280 proyectiles de fuego de ametralladora de su Mitsubishi A6M Zero.



En marzo de 1942 el Tainan Kaihun Kokutai fue destinado a Rabaul reorganizándose con nuevos mandos, equipos y pilotos. Como alferez de navío, Sasai recibió el mando del 2º Escuadrón convirtiéndose así en Buntaicho o líder de escuadrón, alternando su base entre la misma Rabaul y Lae. En su unidad Sasai voló al lado de experimentados pilotos como Saburo Sakai, Enji Kakimoto o Toshio Ohta. La colaboración con Sakai fue mutua, al instruir el afamado as a su propio jefe en las tácticas del combate aéreo y al mismo tiempo impresionarse por la empatía mostrada por Sasai hacia sus subordinados, actitud raramente manifestada por otros comandantes de unidad.

En mayo de 1942, concretamente el día 4, Sasai evidenció su formidable eficacia al derribar todos los integrantes de un grupo de tres P-39 en menos de 20 segundos. El jefe de unidad siguió aumentado su número de victorias logrando incluso cinco derribos en un único día, el 7 de agosto sobre los cielos de Guadalcanal. Esa hazaña quedó en cierta medida empañada por las heridas sufridas por su compañero Saburo Sakai que a modo de regalo recibió la insignia personal de su jefe, la hebilla de su cinturón en forma de tigre, que le servía como especie de amuleto.

El 26 de agosto del mismo año, Sasai se encontraba al frente de un grupo de nueve cazas protegiendo una formación de bombarderos "Betty" cuya misión era bombardear el campo Henderson en Guadalcanal. Durante esa acción fueron atacados por doce cazas norteamericanos "Wildcat" del VMF-223. Sasai no regresó de esta misión probablemente abatido a manos del capitán Marion E Carl, que se convertiría en el primer as del Cuerpo de Marines.

En una carta enviada a su familia antes de morir reconocía 54 victorias, sin embargo, fuentes oficiales indican que Sasai voló en 76 misiones con el GA Tainan reconociendo 27 victorias. Tras su fallecimiento fue ascendido póstumamente en dos grados alcanzando el rango de capitán de corbeta.



jueves, 18 de mayo de 2017

Juicio a Yamashita

Juicio a Yamashita


General Tomoyuki Yamashita

Tomoyuki Yamashita nació el 8 de noviembre de 1885 en el pequeño pueblo de Osugi Mura en la isla de Shikoku. Tras su paso por la academia militar, trabajó en el Ministerio de Guerra llegando a ser agregado militar en Alemania, Hungría y Austria.  Después de jugar un papel menor en el fallido intento de golpe de estado del 26 de febrero de 1936, donde oficiales del ejército oficiales asesinaron a varios ministros y trataron de derrocar al gobierno, cayó en desgracia y fue destinado a Corea. De 1938 a 1940, estuvo al mando de la 4ª División de infantería en el norte de China.  En diciembre de 1940, formó parte de una delegación militar secreta que participó en conversaciones con Alemania e Italia.  El 6 de noviembre de 1941, fue nombrado comandante del 25º Ejército que tras el ataque a Pearl Harbor, llevó a cabo una campaña relámpago en Malasia que concluyó con la caída de Singapur. Fueron capturados aproximadamente 130.000 soldados enemigos.

Sin embargo, este éxito despertó los celos del primer ministro Tojo y por ello, el 17 de julio de 1942, fue enviado a Manchuria hasta principios de octubre de 1944 con la caída de Tojo cuando de nuevo se le dio un mando de importancia, concretamente la 14ª Área Militar que comprendía las islas Filipinas. Tropas norteamericanas desembarcaron el 20 de octubre de 1944 en la isla de Leyte realizando rápidos progresos. En enero de 1945, Yamashita fue obligado a refugiarse en las montañas con sus tropas. Sin embargo el almirante Iwabuchi, que estaba bajo las órdenes de Yamashita, permaneció en Manila, declarada por Yamashita como "ciudad abierta" junto con 17'000 de sus tropas. A pesar de ello, esas tropas masacraron a miles de civiles filipinos  durante la batalla que libraron contra los estadounidenses por el control de la capital, algunas estimaciones cifran el número total de muertos en 100.000. El 3 de septiembre de 1945, Yamashita se rendía a los americanos con el remanente de su ejército.

Yamashita fue juzgado por crímenes de guerra por una Comisión Militar estadounidense en Manila, Filipinas.  El escrito de acusación afirmaba que el general Tomoyuki Yamashita "entre el 9 de octubre de 1944 y el 2 de septiembre de 1945, en las Islas Filipinas, mientras era comandante de las fuerzas armadas de Japón en guerra con los Estados Unidos y sus aliados, ignoró ilegalmente y no pudo cumplir con su deber como comandante el control de las operaciones de sus tropas bajo su mando, permitiéndoles cometer brutales atrocidades y otros altos crímenes contra el pueblo de los Estados Unidos y de sus aliados y dependencias, particularmente las Filipinas; violando así la ley de la guerra".  La acusación más grave a la que Yamashita tenía que responder era en referencia a la masacre de Manila. Sus abogados defensores abogaron que Yamashita no podía ser responsable de los crímenes cometidos por las fuerzas del almirante Iwabuchi, al haber desobedecido las propias órdenes de Yamashita, que había declarado Manila como "ciudad abierta" así como la orden de evacuación de todas las unidades de ejército japonés.


Imagen del general Yamashita, sentado en el banquillo de los acusados

Los jueces rechazaron este argumento invocando el concepto de responsabilidad de mando para probar la culpabilidad de Yamashita. Según este concepto, Yamashita era culpable ya que, en su posición como superior jerárquico, tenía la responsabilidad y el poder de poner fin a las exacciones y castigar a los culpables.  Como resultado, Yamashita fue declarado culpable de crímenes de guerra.  El 7 de diciembre de 1945, coincidiendo con la fecha del ataque a Pearl Harbor fue condenado a muerte.  A pesar de muchas peticiones procedentes de varias fuentes que habían seguido el juicio y que consideraban que hubo ciertas irregularidades, el general MacArthur se negó a revisar el juicio. Se presentó una apelación en la Corte Suprema de Estados Unidos contra la sentencia de la comisión militar remitida por los propios abogados de la defensa, pero fue rechazada el 4 de febrero de 1946.  Tomoyuki Yamashita fue ejecutado en la horca el 23 de febrero de 1946.


Petición de conmutación de la sentencia a muerte del general Yamashita

El juicio de Yamashita fue el primero en el que se invocó el concepto de responsabilidad de mando aplicándolo sin piedad y de forma muy peculiar. Pero a finales de 1945 esta doctrina jurídica no se había utilizado por lo que durante décadas el fallo del juicio al general Yamashita siempre ha estado envuelto en sospechas de injusticias., entre los propios juristas como lo muestra las palabras de un reciente estudio:

 "Es un principio general del derecho que las sanciones penales no deberían ser impuestas a nadie sin que exista prueba de la culpabilidad de su parte. Sin embargo, Yamashita, fue condenado y ejecutado por un crimen, por el cual no existía prueba de su culpabilidad, en un juicio en el cual se obviaron las garantías constitucionales más elementales. Este estudio ha mostrado que, aún bajo la estricta teoría objetiva de la responsabilidad del superior, el comandante Yamashita no hubiera sido condenado. En suma, este trabajo ha demostrado que el veredicto y la decisión de la Corte Suprema fueron en gran parte influidos por el racismo".
Si bien también existen opiniones que matizan los argumentos de la sentencia como la declarada por el juez  Murphy de la Corte Suprema de Justicia:

"No existió un serio intento de acusar o probar que él [Yamashita] cometió una violación reconocida en las leyes de la guerra. El no fue acusado de haber participado personalmente en los actos atroces o de ordenar o condonar su comisión. Ni siquiera el conocimiento de estos crímenes le fue atribuido. Lo que se alegó fue que él, ilícitamente, desatendió y faltó a su obligación como comandante de controlar las operaciones de los miembros bajo su mando, permitiéndoles cometer los actos atroces. Los anales históricos de la guerra y los principios establecidos por el Derecho internacional no disponían del más mínimo precedente para un cargo de tal naturaleza. Esta acusación, en efecto, permitió a la comisión militar conformar el crimen como ellos querían, haciéndolo depender de su desfavorable opinión sobre las obligaciones del apelante y su consecuente descuido, una costumbre que rememora a aquellas practicadas en naciones menos respetadas en años recientes".

En resumen, el juicio del general Yamashita siempre estará bajo sospecha. Existen opiniones que resaltan la figura de un MacArthur que en esos momentos era de facto el emperador del Pacifico, y su posible papel en el juicio contra. Yamashita. Se ha de reconocer que el general nipón defendió las Filipinas de una forma mucho más eficaz que su "colega" norteamericano y por ello existen teorías que avalan el deseo de revancha por parte de MacArthur. Sea como fuese, lo cierto es que la aplicación del delito de responsabilidad de mando tiene un antes y un después en el juicio de Yamashita, sin embargo, su aplicación jurídica varia bastante si es sobre vencidos o vencedores. En la masacre de My Lai ocurrida en la guerra de Vietnam, el teniente Calley fue acusado y culpado de los actos cometidos mientras su superior el capitán Medina que bajo el concepto de responsabilidad de mando aplicado a Yamashita debería haber sido encontrado culpable en realidad fue exonerado de cualquier cargo.

viernes, 22 de mayo de 2015

Incidente del puente de Marco Polo.

Incidente del puente de Marco Polo.


Soldados japoneses en el Puente de Marco Polo

El incidente del puente Marco Polo, también conocido como el incidente Lugouqiao; puente de Lugou o incidente del 7 de julio  fue una acción militar entre el Ejército Revolucionario Nacional de la República de China y el Ejército Imperial Japonés y que, a menudo se ha considerado como el detonante del inicio de la Segunda Guerra Chino-Japonesa (1937-1945).

Antecedentes.

Las tensiones entre el imperio del Japón y la República de China habían sido más que visibles desde la invasión japonesa de Manchuria en 1931 y la posterior creación de un Estado títere denominado Manchukuo, con Puyi, el último monarca de la dinastía Qing, como su soberano. Aunque el gobierno chino del Kuomintang (KMT) se negó a reconocer la autoridad de Manchukuo, se entablaron negociaciones para una tregua entre Japón y China en 1931. Sin embargo, la presion militar iba aumentando y a finales de 1932 el ejército japonés invadió Rehe (provincia de Jehol) que fue anexionada en Manchukuo en 1933.

Bajo los términos del Protocolo Boxer de 7 de septiembre de 1901, China había concedido a las Naciones con legaciones en Pekín el derecho de guarnición en las estaciones de ferrocarril en doce puntos específicos a lo largo de la linea que conectaba Beijing con Tianjin. Se trataba de asegurar la comunicación abierta entre la capital y el puerto. Por un acuerdo complementario del 15 de julio de 1902, a estas fuerzas se les permitió realizar maniobras sin informar a las autoridades de otras naciones presentes en China.

En julio de 1937, Japón había ampliado sus fuerzas hasta llegar a una cifra estimada entre 7000 – 15.000 hombres, en su mayoría destinados a cubrir las líneas de ferrocarril. Este número de hombres y el material suministrado era varias veces el tamaño de los destacamentos desplegados por las potencias europeas y muy superior a los límites establecidos en el Protocolo Boxer.

Acontecimientos.

Las fuerzas japonesas y chinas presentes en las afueras de la ciudad de Wanping, una ciudad amurallada al sureste de Beijing, intercambiaron fuego aproximadamente a las 23:00 h. del 7 de julio de 1937. La causa exacta de este incidente sigue siendo hoy un misterio. Cuando un japonés soldado  Shimura Kikujiro no pudo regresar a su puesto, el comandante Ji Xingwen del 219º Regimiento chino, 37ª división, 29º Ejército  recibió un mensaje por parte de los mandos  japoneses exigiendo permiso para entrar en Wanping  y buscar al soldado desaparecido. Los chinos se negaron y si bien el soldado Shimura regresó a su unidad, en ese momento ambos bandos ya se estaban movilizando.

Esa misma noche, una unidad de infantería japonesa intentó romper las defensas de Wanping y fue rechazada. Un ultimátum emitido por parte de los japoneses llegó dos horas más tarde. Como medida de precaución, Qin Dechun, el comandante interino del  29º Ejército, contactó con el general Feng Zhian, comandante de la 37ª División con el fin de alertar a sus tropas.

Alrededor de las 04:00 h del 8 de julio de 1937, comenzaron a llegar los refuerzos de ambas partes a la zona en conflicto. Los chinos también movilizaron una división adicional. Una hora más o menos más tarde el ejército japonés abrió fuego y atacó a las tropas chinas parapetadas en el puente de Marco Polo, junto a un moderno puente ferroviario situado al sureste de la ciudad.


Tropas chinas defendiendo la posición.

El coronel Ji Xingwen lideró las defensas chinas con aproximadamente solo 100 hombres y la orden de defender el puente a toda costa. Después de intensos combates contra hombres del entonces comandante Kiyonao Ichiki, el mismo que lanzaría años más tarde el ataque japonés casi suicida en la batalla de rio Tenaru, Guadalcanal, los chinos pudieron mantener el puente gracias a la llegada de tropas de refuerzo. En este momento, el ejército japonés y  miembros del Asuntos Exteriores comenzaron negociaciones en Pekín con el gobierno nacionalista chino.

Se alcanzó un acuerdo verbal con el general Qin, por el que se ofrecería una disculpa a los chinos; se castigaría a los responsables; el control de Wanping pasaría a la policía civil Hopei y no al 219º Regimiento chino; así como una exhaustiva vigilancia de los "comunistas" en el área. Estos términos fueron acordados, aunque el comandante de la brigada de infantería de guarnición japonesa, el general Masakazu Kawabe inicialmente rechazó la tregua y, contra las órdenes de sus superiores, continuó bombardeando Wanping durante las siguientes tres horas, hasta que cesó el fuego y trasladó sus fuerzas hacia el noreste.

Consecuencias.

Aunque se produjo realmente un alto el fuego, no hubieron más esfuerzos para intentar desactivar el conflicto que iba in crescendo, en gran parte debido a las medidas tomadas por parte de los comandantes del ejército japonés de guarnición en China en convivencia con los altos mandos  militaristas del estado Mayor del Ejército Imperial. Wanping fue bombardeada el 20 de julio y los combates a gran escala estallaron en Langfang el 25 de julio. Después del llevar a cabo un desafortunado y sangriento ataque a las líneas japonesas el 27 de julio, el general Sung sufrió una derrota y fue obligado al día siguiente a replegarse detrás del río Yongding.


 Soldados japoneses bombardeando Wanping

Los japoneses dieron a Sung y a sus tropas "paso libre", para posteriormente trasladarse a pacificar los alrededores de Beijing y Tianjin. Sin embargo, el ejército japonés tenía órdenes de no avanzar más allá del río Yongding. En un cambio repentino, Ministro de Asuntos Exteriores del gobierno Konoe inició negociaciones con el gobierno de Chiang Kai-Shek en Nanjing y afirmó que: "Japón quiere cooperar con China, no invadirla". No obstante, las negociaciones no fueron más lejos y el 9 de agosto de 1937, un oficial naval japonés recibió un disparo en Shanghai, comenzando de hecho la guerra a gran escala.

El agravamiento de las tensiones tras el incidente del puente Marco Polo condujo directamente a una guerra total entre el Imperio de Japón y China, como se demostró a finales de julio en la batalla de Beiping – Tianjin y en agosto con la batalla de Shanghai.

La heroica resistencia mostrada por los soldados pobremente equipados del 29º Ejercito inspiró la "Marcha de la espada" en 1931, que — con la letra ligeramente retocada — se convirtió en la marcha habitual del Ejército Revolucionario Nacional y popularizó el epíteto racial "guizi" - cuyo significado es demonio - para describir a los invasores japoneses

Existen algunas divergencias de opinión entre los historiadores sobre el incidente. Algunos historiadores creen que el incidente fue un accidente involuntario. Otros en cambio, creen que el incidente puede haber sido planeado y ejecutado por el ejército japonés para proporcionar un pretexto para la invasión de China — una tesis apoyada por las ambiciones expansionistas coloniales de Japón en esos momentos. Esta ultima interpretación refleja un sentimiento arraigado por muchos japoneses en esa época;  "Asia debía ser gobernada por asiáticos", y mas concretamente los japoneses debían reemplazar a los coloniales gobernantes europeos.


Tropas japonesas marchando sobre el puente de Marco Polo

Un historiador japonés de extrema derecha alegó incluso que el incidente fue organizado por el partido comunista chino, que esperaba que el incidente conduciría a una guerra de desgaste entre el ejército japonés y el Kuomintang.


El incidente del puente Marco Polo comparado con la magnitud de la guerra chino-japonesa casi fue una insignificancia, militarmente hablando. Un puñado de combatientes chinos defendiendo una posición ante soldados japoneses de una unidad tamaño batallón. Realmente la importancia, que la tiene y mucho, es ante todo simbólica, significó el inicio de un conflicto brutal y apenas tratado que dejó más de 25 millones de muertos, en su mayoría civiles. el incidente no fue más que la mecha que encendió el barril de pólvora que era China en 1937.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Batalla de la isla de Savo III

Proviene de Batalla de la isla de Savo I
                   Batalla de la isla de Savo II

Isla de Savo: consecuencias.



La retirada japonesa fue el aspecto más controvertido de la batalla. Habiendo destruido la fuerza de cobertura de Turner, Mikawa tuvo la oportunidad de convertir una victoria táctica en una estratégica. Poco se interponía entre él y los transportes americanos. En Tulagi, cinco transportes estaban defendidos por dos destructores y tres transportes-destructores, y en Guadalcanal se hallaban 13 transportes más, escoltados por otros tres destructores y cinco anticuados dragaminas-destructores. A las 02:16 h.  Mikawa analizó la situación con su estado mayor. Como ya se mencionó, la fuerza japonesa se había dividido en dos grupos con el destructor Yunagi operando por separado. El vicealmirante japonés creía que tardaría dos horas para volver a reunir su fuerza y revertir el rumbo hacia el este para atacar a los transportes. Sólo quedaba una hora de noche y estaba seguro que la flota sería vulnerable a los ataques aéreos cuando llegara la luz diurna. Si Mikawa seguía el rumbo hacia el noroeste, los japoneses se encontrarían unos 120 km de Iron Bottom Sound y así tendría una buena oportunidad de evitar el ataque aéreo de los portaaviones que según las evaluaciones de Mikawa evaluado se efectuaría por la mañana. En el lado positivo de Mikawa, tras el encuentro con los cruceros aliados, la flota japonesa aun disponía del 60 por ciento de su munición de artillería y del 50 por ciento de sus torpedos. Después de considerar brevemente sus opciones, Mikawa decidió a las 02.20 h. interrumpir la acción y volver a Rabaul.

Mikawa no lo sabía en ese momento, pero él sólo había derrochado la mejor oportunidad de la IJN de asestar un golpe definitivo a la primera ofensiva norteamericana en el Pacífico. Es difícil imaginar que los americanos aferrándose a su exigua posición en Guadalcanal tras la destrucción de su flota de transporte y los suministros. Por la posible destrucción de los transportes estadounidenses habría valido la pena el sacrificio de toda la fuerza de Mikawa.

Aunque la victoria de Mikawa fue un triunfo incompleto, la batalla de la isla de Savo seguía siendo la peor derrota de la US Navy había sufrido en el mar. Cuando el Canberra se hundió a las 08.00 h. después de ser hundido por los destructores americanos, llevo como recuento total cuatro cruceros pesados hundidos y un quinto dañado. Dos destructores también resultaron dañados. Las pérdidas de personal fueron muy elevadas, ascendiendo a 1.077 marineros muertos y 709 heridos.
Las pérdidas japonesas fueron menores. El Chokai sufrió tres impactos que causaron la muerte de 34 marineros y 48 heridos.  El Aoba tuvo daños en la cubierta pero no sufrió bajas entre la tripulación. El Kinugasa tuvo un muerto y un herido por dos impactos. La única explosión causada por un proyectil de 5 pulgadas en el Tenryu mató 23 marineros e hirió a otros 21. La pérdida más grave se produjo después de la batalla, el 10 de agosto, cuando el submarino americano S-44 hundió el Kako camino a Kavieng. La falta de una adecuada pantalla de destructores le costó a Mikawa esta baja. Cuando se hundió el Kako, perecieron 71 tripulantes y 15 resultaron heridos.

La batalla de la isla de Savo confirmó varios hechos claves. La Armada Imperial Japonesa demostró ser la dueña del combate nocturno y estableció la dominación en las aguas alrededor de Guadalcanal durante la noche. La doctrina japonesa en la lucha durante la noche había sido probada bajo condiciones reales de combate y demostró el uso superior de los instrumentos ópticos nocturnos, el excelente torpedo tipo 93 y la dependencia de una artillería rápida y precisa. A pesar de la fama de los torpedos tipo 93, no todos los barcos en la batalla de la isla de Savo llevaron esta arma, y tal vez sea más importante señalar que fueron los proyectiles de la artillería naval japonesa los principales agentes de destrucción en la batalla de la isla de Savo.


Para los estadounidenses, había poco que ve favorablemente. Descubrieron que la doctrina americana referente al ataque durante la noche era defectuosa y que los buques de guerra americanos simplemente no estaban preparados para dicho combate nocturno. El factor más importante que condujo a la debacle de la isla de Savo fue la total sorpresa total obtenida por los japoneses. Esto fue debido a los problemas de mando y control en todos los niveles, a la evaluación de Turner de las intenciones japonesas y el despliegue defectuoso resultante. La potencial ventaja tecnológica ofrecida por radar se desaprovechó totalmente ya que los comandantes no entendieron las capacidades y limitaciones de los nuevos equipos.

Los grandes derrotados.


Contralmirante Victor Crutchley



Contralmirante Richmond Turner


domingo, 1 de diciembre de 2013

Batalla de la isla de Savo II

Batalla de la Isla de Savo: fase I

Proviene de Batalla de la isla de Savo I



Mikawa tuvo gran suerte cuando se acercó a la isla de Savo. A las 23:12 h., envió cuatro hidroaviones con el fin de proporcionar información sobre el despliegue aliado y también para iluminar los blancos en el momento oportuno. Si bien la presencia de estos aviones por encima de las naves aliadas, fue identificada correctamente como hidroaviones de crucero, fracasó a la hora de a los comandantes aliados. A Las 24:00 h., Mikawa ordenó situar los buques en sus puestos de combate y aumentar la velocidad hasta los 26 nudos. La primera nave aliada que se avistó fue el destructor de piquete Blue navegando al sudoeste de la isla de Savo. Vigías en la proa de la nave japonesa, Chokai, divisaron el barco americano a más de cinco millas a las 00:50 h. No era la primera vez que las habilidades ópticas japonesas resultarían superiores a las ventajas electrónicas americanas. Mikawa hábilmente disminuyó su velocidad para reducir su estela y el Blue navegó más lejos, hacia al sur.

Los observadores del Chokai permanecieron alerta cuando a las 01:34 h. observaron al destructor Jarvis tal y como salía de la zona tras haber sido dañado por los ataques aéreos anteriores. Sólo dos minutos más tarde, los mismos vigías avistaron tres "cruceros" a unas seis millas. Eran las confiadas naves del Grupo Sur. La batalla comenzó a las 01:38 h. cuando el Chokai disparó cuatro torpedos hacia el Canberra; todos fallaron. Chokai abrió fuego sobre el Canberra a las 01:43 h. En pocos minutos, los cruceros Furutaka, Aoba y Kako se unió al ataque del Chokai; en esos momentos el Grupo Sur de cruceros aliados se hallaba iluminado por las bengalas lanzadas por los hidroaviones japoneses.



El Canberra quedó fuera de combate por los 24 impactos que recibió en pocos minutos de batalla. Su capitán fue mortalmente herido, y rápidamente perdió velocidad, y un impacto por debajo de la línea de flotación produjo que el barco escorase a estribor de forma severa. Afortunadamente para los aliados, todos los 11 torpedos disparados contra el crucero australiano fallaron. El otro crucero pesado del Grupo Sur, el Chicago, respondió al ataque de forma ineficaz. Su tripulación fue incapaz de comprender que la maniobra repentina del Canberra significaba que ya estaba siendo atacado. A las 01:47 h., un torpedo del Kako golpeó al crucero en su proa por estribor. Un segundo torpedo impactó a popa en la sala de máquinas, pero no explotó. El Chicago no pudo encontrar ningún objetivo para ser bombardeado desde su batería principal, pero se enfrentó al Tenryu con sus cañones de 5 pulgadas, probablemente anotando un impacto que causó muchas bajas en la nave nipona. El Chicago continuó su rumbo hacia el oeste y pronto salió del combate. Inexplicablemente, su capitán no envió ningún informe de esta acción. También se negó a dar órdenes a sus dos destructores. El destructor Patterson estaba enfrentándose por lo menos con tres cruceros japoneses con disparos de artillería, pero fue dañado por los disparos de respuesta y le fue ordenado salir del combate a las 02:10 h. De todas las naves aliadas presentes, el destructor Patterson fue la que estuvo más alerta y también la que mejor .se enfrentó al enemigo. El destructor Bagley lanzó un ineficaz ataque con torpedos para luego dirigirse al oeste. En tan sólo siete minutos, los cruceros de Mikawa habían neutralizado el grupo meridional. Ninguna de las naves del Grupo Sur tuvo la molestia de informar sobre los acontecimientos.

Batalla de la Isla de Savo: fase II

El Grupo Norte, bajo el mando del capitán del crucero Vincennes, permaneció ajeno a la presencia de la fuerza de Mikawa. Durante el enfrentamiento con el Grupo Sur, las fuerzas japonesas se habían dividido en dos columnas separadas. Mas hacia el este estaba el Chokai al frente más el Aoba, Kako y Kinugasa; la columna occidental incluía al Yubari, Tenryu y Furutaka. El único japonés destructor, Yunagi, estaba afanosamente involucrado en un duelo de artillería esporádico con el Jarvis al sur de la isla de Savo.

Previamente, los magníficos vigías del Chokai habían descubierto a las 01:38 h. uno de los cruceros del Grupo Norte, el Vincennes, a la impresionante distancia de nueve millas. Siguiendo el plan de batalla, Mikawa giró hacia el norte para atacar el segundo grupo de naves enemigas. Utilizando la misma táctica que había diezmando el Grupo Sur, los cruceros japoneses atacaron primero con torpedos y acabaron después con fuego de cañón. A las 01:48 h., el Chokai lanzó cuatro torpedos sobre el Vincennes a unas seis millas. Una vez más, las naves americanas fueron sorprendidas completamente. A las 01:50 h., los tres cruceros del Grupo Norte fueron iluminados por potentes reflectores japoneses. Con esta iluminación, los cruceros japoneses encontraron rápidamente sus objetivos. El Chokai iluminó el Astoria a 7.700 yardas; el Aoba encontró al Quincy a 9.200 yardas y el Kako resaltó en la oscuridad al Vincennes a 10.500 yardas. Las naves americanas quedaron atrapadas con sus armas principales apuntando a proa y popa y los japoneses podrían ver las tripulaciones enemigas corriendo sobre sus cubiertas.

La habilidad y el entrenamiento de los artilleros de los cruceros japoneses fueron exhibidas una vez más minuciosamente. El Aoba y el Kako se anotaron éxitos en su tercera salva y el Chokai aceró en su quinto intento. El crucero pesado Quincy rápidamente quedó inmóvil., pero la nave estadounidense murió peleando. Las primeras salvas del Aoba causaron incendios agravados por los propios hidroaviones del Quincy que ardieron rápidamente así como los impactos sobre el puente de la nave. Pronto, Aoba, Furutaka y Tenryu estaban arrojando fuego sobre el Quincy. El crucero norteamericano pudo salir del enfrentamiento con las tres naves niponas antes de ser obligado a quedarse fuera de combate. El Aoba y el Tenryu atacaron al Quincy con tres torpedos mas que se añadieron a la carnicería. Todo ello, combinado con los 54 impactos de granadas de distinto calibre fue suficiente para asegurar la destrucción de Quincy, con la pérdida de 370 integrantes de la tripulación. El crucero fue la primera nave hundirse durante la batalla, a las 02:38 h, convirtiéndose en la primera nave en desaparecer dentro del Iron Bottom Sound.  A cambio, el Quincy infligió el único daño significativo a los japoneses durante la batalla cuando impactó dos rondas de proyectiles de 8 pulgadas en la sala de mapas del puente del Chokai, donde por suerte para los japoneses no se encontraban ni Mikawa ni su Estado Mayor. Se produjeron treinta y seis hombres bajas entre muertos y heridos.
Aun estando bajo el fuego del Kako, el crucero Vincennes rápidamente encontró en el Kinugasa un blanco para sus cañones de 8 pulgadas impactándolo en su segunda salva. El crucero Kako rápidamente comenzó a cañonear con acierto el Vincennes gracias a los fogonazos del propio crucero estadounidense así como los incendios otra vez de sus hidroaviones de observación. Tal y como el capitán de Vincennes intentó maniobrar radicalmente, sufrió un impacto de un torpedo lanzado por el Chokai a las 01:55 h. Otro torpedo, esta vez proveniente del Yubari, explotó a las 02.03 h. El Chokai continuó cañoneando al crucero inmóvil y aproximadamente 74 proyectiles cayeron sobre el buque. La nave fue abandonada a las 02:30 h. para hundirse posteriormente a las 02:58 h. Un total de 332 tripulantes murieron.

La reacción del Astoria ante el repentino ataque japonés refleja la confusión general de todo el Grupo Norte. El oficial de artillería de la nave ordenó rápidamente que sus cañones de 8 pulgadas se enfrentasen al enemigo después de que su barco fuese atacado por el  Chokai, en cambio el capitán de la nave ordenó a cesar el fuego después de llegar al puente y pensar que estaba siendo atacado por naves aliadas. El certero fuego del Chokai puso fuera de servicio dos de las tres torres de 8 pulgadas del Astoria, pero el crucero de la US Navy fue capaz de disparar 53 proyectiles de 8 pulgadas antes que todos sus cañones fueran destruidos. Los disparos del Aoba, Kinugasa y Kako remataron al Astoria ya que fue alcanzado entre 34 y 63 impactos. Se hundió con 216 de su tripulación.




La última acción de la noche ocurrió cuando la fuerza japonesa se retiraba al norte de la isla de Savo. A las 02:16 h., el Tenryu y Furutaka se enfrentaron con el destructor Ralph Talbot que seguía patrullando al norte de la isla de Savo. En el primer intercambio, los japoneses solo impactaron una única vez. Minutos más tarde, el Yubari había iluminado el destructor y rápidamente cayeron sobre él cinco proyectiles. El Ralph Talbot se salvó por un vendaval de lluvia que obligó a la fuerza japonesa continuar su trayecto hacia el noroeste.

Continúa en Batalla de la isla de Savo III

martes, 26 de noviembre de 2013

Batalla de la isla de Savo I

Batalla de la Isla de Savo

Antecedentes y primeros movimientos

La campaña naval más larga de la guerra del Pacífico comenzó el 07 de agosto de 1942 cuando los Estados Unidos lanzaron su primera ofensiva de la Segunda Guerra Mundial. El objetivo era   el inacabado aeródromo japonés situado en la isla de Guadalcanal dentro del archipiélago de  las Islas Salomón. Fueron enviado cinco batallones de marines  contra la débil resistencia por lo que rápidamente tuvieron éxito en la captura de la pista de aterrizaje, circunstancia que se produjo en la tarde del 8 de agosto.

La sorprendida guarnición japonesa de la isla estaba compuesta por tropas de construcción y fue incapaz de evitar el avance americano hacia el aeródromo. Sin embargo, las advertidas fuerzas japonesas presentes en el área de Rabaul respondieron rápidamente. La primera reacción llegó en forma de un ataque aéreo con 27 bombarderos G4M1 escoltados por 18 cazas A6M2 modelo 21. Un grupo de nueve bombarderos en picado D3A también fue enviado a Guadalcanal que se hallaba a 565 km, aunque carecían del alcance suficiente para regresar a Rabaul. Uno de los cazas regresó, dejando 53 aviones disponibles para el ataque a las unidades navales que se hallaban en la cabeza de playa norteamericana. El ataque fue un completo fracaso que costó la perdida de cinco bombarderos, dos ceros y todos  bombarderos en picado  a cambio de un solo impacto de bomba sobre un destructor norteamericano. Los cazas  estadounidenses que defendían a sus compatriotas también sufrieron importantes bajas. Se perdieron nueve aviones, pero el objetivo de desbaratar el desembarco no se consiguió.

Al día siguiente, 8 de agosto, los ataques aéreos japoneses continuaron. Esta vez, 27 bombarderos cargados con torpedos y escoltados por 15 cazas se dirigieron a Guadalcanal. Incapaces de encontrar su principal objetivo, los portaaviones estadounidenses, volvieron a atacar la cabeza de playa. En realidad el ataque fue llevado a cabo por 23 bombarderos. Gracias a los cazas norteamericanos y al fuego antiaéreo, 18 de los bombarderos fueron destruidos, junto con dos cazas. En el bando contrario, un destructor fue alcanzado por un torpedo y finalmente se hundió en el trayecto de regreso a los Estados Unidos para ser reparado y un bombardero se estrelló en un transporte, circunstancia que provocó un grave incendio que obligó al final a su hundimiento por su propia tripulación.

Los ineficaces ataques aéreos no fueron las únicas reacciones previstas por los japoneses. Tan pronto como el vicealmirante Mikawa se enteró del desembarco norteamericano en  Guadalcanal, decidió ejecutar un ataque naval  nocturno con las unidades de superficie que estaban disponibles. A las 08:30 h. del 7 de agosto, ordenó a sus cinco cruceros pesados disponibles reunirse en Simpson Harbor en Rabaul. Estaban incluidos aparte de su nave insignia, el crucero pesado Chokai, las cuatro naves del Sentai 6 que estaban ancladas en Kavieng fuera del alcance de cualquier ataque aéreo aliado. También se añadieron a la fuerza de Mikawa dos viejos cruceros ligeros del Sentai 18 y tan solo un anticuado destructor disponible. Salvo las cuatro naves  del Sentai 6, ninguno de esos barcos nunca había trabajado con el resto. A las  14:30 h. la fuerza de ataque había recibido sus órdenes y, bajo el propio mando de Mikawa, zarpó de Simpson Harbor.


Vicealmirante Mikawa Gunichi

Mikawa disponía de muy poca información sobre el tamaño  de las fuerzas estadounidenses alrededor de Guadalcanal y, un aspecto aun más importante aún, la ubicación de la fuerza de portaaviones americanos. Los aviones de largo alcance que despegaron de Rabaul fueron incapaces de encontrar los portaaviones, pero Mikawa eventualmente sí que recibió información sobre la ubicación y el número de naves aliadas presentes en las aguas de Guadalcanal. Un informe proporcionado por un hidroavión lanzado desde un crucero indicaba que la fuerza americana era más grande que la suya propia, pero estaba seguro de que la superioridad japonesa en tácticas de combate nocturno aumenta las probabilidades de éxito. A las 13:00 h. puso rumbo desde la isla de Bougainville hacia el sur, más concretamente hacia la zona de las islas Salomón que pronto sería conocida como "la ranura". Su intención era atacar a la fuerza de desembarco estadounidense durante la noche del 8 al 9 de agosto. La fuerza naval japonesa navegaría por el sur de la isla de Savo y entraría en las aguas de Guadalcanal que pronto sería conocida como “Iron Bottom". Una vez dentro, los cruceros japoneses podrían dedicarse a hundir en primer lugar las unidades enemigas situadas frente a Guadalcanal antes de girar hacia el norte y atacar los buques situados frente a Tulagi. Hay que tener en cuenta que en las instrucciones de Mikawa no se hace mención de atacar la flota de transporte.

El plan japonés contaba con la sorpresa.. Si la fuerza de Mikawa fuese detectada previamente, podría ser atacada por aviones estadounidenses de los tres portaviones que operaban al sur de Guadalcanal o, incluso si su fuerza no fuese atacada desde el aire, se enfrentaría a una superior fuerza de superficie aliada una vez llegase a aguas de Guadalcanal. El inminente desastre para los aliados estaba directamente relacionado con su incapacidad para descubrir la aproximación de Mikawa. Hubo ciertamente muchas oportunidades para asegurar que las naves aliadas estuviesen preparadas  y esperando a Mikawa en Guadalcanal. A las 20:00 h. la flota japonesa fue descubierta el 7 de agosto al sur del canal de St George por el  submarino S-38. A la mañana siguiente, en 10.26 h. un avión Hudson de la Royal Australian Air Force (RAAF) avistó la fuerza naval de Mikawa al este de Bougainville. La tripulación RAAF informó dicha flota estaba compuesta por "tres cruceros y tres destructores, dos portahidroaviones  o lanchas cañoneras" con rumbo sureste  y con una velocidad de 15 nudos. Un segundo Hudson volvió a detectar la flota japonesa a las 11:01 h. e informó que incluía dos cruceros pesados, dos cruceros ligeros y una nave desconocida.

La fuerza naval aliada de Guadalcanal estaba bajo el mando general del contraalmirante Richmond Turner. Turner había nombrado al contraalmirante británico Victor Crutchley como su suplente. Turner tenía buenas razones para creer que sus naves de Guadalcanal recibiría el aviso adecuado de un contraataque japonés. Además de los aviones americanos y australianos volando desde Nueva Guinea que cubrían las aguas al sur y al este de Rabaul, hidroaviones norteamericanos PBY y bombarderos B-17 patrullaban toda la zona de las Islas Salomón contra cualquier movimiento enemigo hacia el sur desde la base japonesa del Pacifico central situada en Truk. Incluso después del informe por parte del submarino  S-38 de la flota japonesa avanzando  hacia el sur a gran velocidad el 7 de agosto, Turner preveía que si los japoneses continuaban en esa dirección serian detectados de nuevo por las patrullas aéreas. Sin embargo, el plan de búsqueda estadounidense creado apresuradamente contenía varios agujeros, que se exacerbaron por problemas meteorológicos. Los sectores más propensos a contactar con los japoneses fueron obviados debido a las condiciones climáticas, y una solicitud para una búsqueda por la tarde en la zona más peligrosa fue ignorada. Mikawa cronometró su aproximación cuidadosamente a fin de no entrar en la zona de peligro de ser avistado hasta el final de la tarde, mucho después de los vuelos de la mañana habían alcanzado los límites más alejados de sus alcances. El hecho de que no se habían realizado las patrullas en el sector más probable de avistamiento de la flota enemiga sólo se le comunicó a  Turner a las 23:33 h. del 8 de agosto.


Crucero pesado Chokai, buque insignia de la flota japonesa.

Los dos Hudsons que avistaron las fuerzas japonesas durante la mañana tenían órdenes de mantener el contacto hasta que llegase otro avión a la zona sin embargo no cumplieron tal cometido. Además de eso, sus habilidades para identificar los tipos de buque enemigos fueron muy deficientes. Lo peor fue que dichos informes de contacto no llegaron a  Turner hasta bastante tiempo después; a las 19:00 h. para el primer contacto y a las 21:30 h. para el segundo caso.

Dada la falta de datos de contacto después de las 11:01 h. y la identificación errónea de la fuerza japonesa, que incluía  dos portahidroaviones que no planteaban ninguna amenaza para la cabeza de playa del desembarco, Turner no hizo nada para aumentar el estado de alerta de sus naves en Guadalcanal. Debido a estas erróneas informaciones dedujo razonablemente que la intención de la flota japonesa era la creación de una base para hidroaviones la isla de Santa Isabel, al noroeste de Guadalcanal. Turner fue culpable de intentar discernir las intenciones japonesas, sin tener en cuenta el peligro existente y sin prepararse para el curso de las acciones navales que podrían ser peligrosas. Su incapacidad para alertar de la posibilidad de un ataque japonés tendría consecuencias trágicas.

Orden de batalla

Armada de los Estados Unidos



Task Force 62
Contraalmirante Richmond K. Turner


Grupo sur
Contraalmirante Victor Crutchley RN
Cruceros pesados
Australia RAN, Canberra RAN, Chicago
Destructores
Baggley, Patterson


Grupo norte
Capitán Frederick Riefkohl
Cruceros pesados
Astoria Quincy, Vincennes
Destructores
Helm, Wilson


Grupo este
Contralmirante Norman Scott
Cruceros ligeros
San Juan, Hobart RAN
Destructores
Monssen, Buchanan


Barcos patrulla

Destructores
Blue, Ralph Talbot.

Armada Imperial Japonesa



8ª Flota de Ataque


Buque insignia
Crucero pesado
Chokai


Sentai 6
Contraalmirante Goto Aritomo
Cruceros pesados
Aoba, Kinugasa, Kako, Furutaka
Sentai 18

Cruceros ligeros
Tenryu, Yubari
Destructor
Yunagi

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